Vértices y vértigo.

Desde cada una de tus azoteas están volando cada día mis pesadillas. Antes me daba miedo. Siempre me pregunto por qué soy menos. Y no más. O como el resto.

Las curvas que no sonríen, 
no sirven para nada.

Los frenos que derrapan tarde,
matan.

Y todas mis cicatrices parece
que no me hayan
enseñado
absolutamente
nada.



Leave a Reply

Celia Munera Pérez ©. Con la tecnología de Blogger.